Un día contaba ante mis
dedos
aparte de una llamada
a algún recuerdo y tantas
ganas de asomarme a mi interior pero al toparme cara
cara con la voz que sé
llevara atado a poco más
que muchos otros tipos
como yo.
Me hizo pensar que había
una sola que esperaba por
mis pasos sentada ante un
ventanal casi llegué al
remordimiento por hallarme
tan ligero y no contar entre
mis dedos lo que das
lo malo en todo es que
ya sé como lo das.
Como té extraño amor
que voy a hacer sin ti
que voy a hacer cundo
la lluvia me haga voces
cuando deje de cansarme
la rutina de trazarte aquí en
mi cuerpo tan descubierto
como lo siento.
De mañana y madrugada
sin tu pelo hasta mí
almohada pasa frío y no sé
diga mi piel no se lamenta
más en mí porque no puede
hacer sertirme más dolor
y yo lo siento sí señor.
Tenía un ánimo gris silbando
al viento en la ventana
un tipi-tipi que quería charlar
lloviendo dos semanas de
cansarme de una vida por
delante y tu recuerdo, como
me acuerdo.
Como la quiero repetía
ya más fuerte la razón
que el sentimiento y en fin
son solo cosas y palabras
para hallarme con que hoy
soy solo un sujeto que ya no
sueña con ser tu sueño.