La claridad de sus ojos
en los días finales de invierno
fueron su
mejor momento.
A cada uno de sus movimientos
la vida le reservaba
el papel
principal.
Turbia mirada de complicidad
fuego cruzado en la oscuridad
en la lujuria de aquellos días
entre disparos de cocaína
viciosa y terminal
no tenía rival.
Acostumbrada al amanecer
a fiestas con "charm" y placer
y el mundo siempre
a sus pies.
Sueños en plata de ley
chica mala, casa bien
lo dice un viejo tango
de Gardel.
Turbia mirada de complicidad
fuego cruzado en la oscuridad
en la locura de aquellos días.
Entre disparos de cocaína
viciosa y terminal
no ternía rival, oh no.
Los amantes
que no se entregan
se (bis)
JCA .com
Aún no hay comentarios,
¡escribe el primero!Para hacer una pregunta o dejar un comentario sobre esta canción, debes estar LOGUEADO
Usamos cookies. Leer más