INTRO:
Ella se sentó
donde está la lumbre,
algo tan ajeno a la costumbre
y al sitio del calor le dijo hogar.
Luego él se sumó
a la llama ardiente
compartiendo el fuego con la gente
sintiéndose seguro en el lugar
que protege desde entonces,
guarda, alienta, cuida, esconde,
el fuego del hogar
que calienta los rincones
y los nombra por su nombre
el fuego del hogar.
Ella se acercó
a las brasas vivas
en su sangre vio correr la vida
y al sitio del calor le dijo hogar.
Cuando regresó
tras haber andando
arrimó al calor su cuerpo helado
sintiéndose seguro en el lugar