Cuando llego la hora clara
del día que ellos presentían
el supo que ella se marchaba
que ya no la vería mas...
Eran las seis, en el reloj
ella tomo la foto de el
y le dio un beso.
Hizo un café
y lo dejo sobre la mesa
porque a esa hora el regresaba
ella partía.
Cuando llego la hora clara
del día que ellos presentían
el supo que ella se marchaba
que ya no la vería mas.
Eran las seis,
levanto el cuello de su abrigo
abrió la puerta, sintió el frío
de la mañana.
Y se marcho
y quiso recordar su cara
vio que el aromo florecía
y que lloraba.
Sabiendo que no estaba lejos
sintió que el la llamaba
se dijo que ya no lo amaba
y no quiso mirar atrás.