El clamor de mi pueblo ha llegado,
estoy listo para irlos a buscar,
cuando todos se amen
como hermanos,
y en mi Iglesia se deje de pecar.
Hermano, tú que hablas
de tu hermano,
hermano, tú que hablas del pastor;
así quieres llegar hasta los cielos,
sin fé, bondad y sin amor.
Pastor, tú que velas por las almas,
a tí tambien te quiero exhortar,
que corrijas los males de la iglesia,
que por ella cuenta
me tendrás que dar.
Amonesta a que todos se aperciban,
velando en ayuno y en oración,
Yo Jehováh de los cielos,
soy el que habla,
en este día a toda la congregación.
Yo Soy Santo y habito entre los santos,
donde hay paz, habito Yo,
donde existen los agravios,
y los rencores,
allí no mora el Espíritu de Dios.
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